EcommLetter #213: En busca del crecimiento sin caos.
Si un día la venta de tu tienda online acelera como un Tesla, más vale que tengas sistemas de control en marcha. Porque pasar de “va bien” a “socorro” es un suspiro.
Hay quien entrena cada día, sin más.
Y luego está quien planifica, mide y ajusta cada detalle, para competir al límite.
Hoy jugamos en esa liga.
Y también es aplicable al ecommerce en crecimiento.
Dejadme que os cuente. Pero antes… hablemos del Ironman
El Ironman es la versión XXL del triatlón: 3,8 km a nado, 180 km en bici y una maratón (42,2 km) del tirón. Tienes 17 horas para completar esta locura. Ni paradas, ni lloriqueos; solo pulso, cabeza fría… y un estómago que no se rinda.
Os presento a Jesús Sánchez:
Ibiza, 1999
Amanece en la playa de Figueretas. El Mediterráneo -en calma- parece un espejo y los altavoces anuncian la salida del Ironman de Ibiza. Entre los 300 trajes de neopreno destaca Jesús Sánchez, 26 años, un dorsal lleno de ilusión y el estómago revuelto por los nervios.
La natación y la bici vuelan. Pero a los 27 km de la temible maratón, el guion se rompe en pedazos: calambres, náuseas, un dolor abdominal que se clava como un anzuelo en las entrañas de Jesús.
El público aplaude, Jesús se dobla, la ambulancia se lo lleva.
DNF—Did Not Finish—tres letras que pesan como losa durante meses.
Analíticas, diarios de entrenamiento y más de treinta productos de nutrición testados después, la conclusión es demoledora: no es falta de entrenamiento, es falta de control sobre lo que come y cuándo.
Cualquier variable mal ajustada —azúcares rápidos, gluten, osmolaridad alta— convierte el intestino en una bomba de relojería.
En 2007 Jesús baja al sótano de su casa con una batidora industrial, una montaña de libros científicos y la determinación de un científico loco. Prueba, descarta, reformula. Pega notas en las paredes con los niveles de sodio, potasio y osmolaridad ideales para no reventar en carrera. Tras cien mezclas fallidas y algún desastre en la cocina, encuentra la fórmula que su estómago acepta sin protestar.
El nacimiento de 226ERS
Ese polvo blanco en una bolsa sin etiqueta es el embrión de la marca 226ERS. Ingredientes limpios, cero gluten, azúcares controlados y la bendita baja osmolaridad. El plan deja de ser «correr y rezar» y pasa a ser medir, ajustar, repetir.
La reacción del cuerpo llega rápido: en 2011 Jesús cruza por primera vez la meta de Kona—la meca del triatlón de larga distancia— y, poco después, revalida presencia otras dos veces.
El broche lo pone en 2012 al proclamarse Campeón de Europa de Larga Distancia en Roth.
Con la validación deportiva en el bolsillo, 226ERS sale del sótano familiar para instalarse en un almacén profesional, luego en un centro logístico internacional y finalmente en una tienda online que hoy despacha más de 80 referencias a 40 países. La marca crece a doble dígito, abraza las suscripciones, abre más canales de venta y convierte su obsesión por la digestión en una ventaja competitiva en el mercado.
¿La moraleja? El talento te empuja a la línea de salida, pero el control milimétrico de todos los factores es lo que te lleva a la meta.
El resto es ya historia: 226ERS nació para apoyar los sueños de quienes desafían los 226 km del Ironman y se ha convertido en la marca de referencia de los campeones:
¿Y qué pinta todo esto en tu ecommerce?
Sustituye “Ironman” por “ecommerce en pleno ascenso de ventas” y verás la conexión entre estas dos ideas:
El impulso inicial te pone por delante (en ventas o en la carrera); pero dominar cada pieza del sistema te mantiene vivo cuando la velocidad se dispara y puedes morir de éxito.
Factor Libre pedalea con 226ERS
Aquí entra nuestro patrocinador de hoy en esta historia.
Factor Libre acaba de publicar un caso de éxito para enmarcar: cómo la tienda de 226ERS creció sin morir de éxito cuando las ventas se dispararon (spoiler: ellos tuvieron bastante que ver).
Por qué mola este documento:
Diseño que da gusto leer.
KPIs concretos y explicación de cómo los mejoraron, con testimonios reales.
La historia completa de 226ERS, del caos al control rentable.
Descárgalo, guárdalo en favoritos o léelo cuando el caos de tu ecommerce empiece a oler a chamusquina 😉
Kit de supervivencia para tiendas online en fase de crecimiento
Para completar la idea principal de hoy: “no crezcas sin control”, he recopilado para ti estas cinco palancas que evitan que el crecimiento se convierta en un infierno:
1/ Ingresos en piloto automático
Las suscripciones son el control de crucero en nuestro ecommerce actual: los pedidos se repiten solos. El cliente recibe su reposición justo a tiempo, tu flujo de caja se vuelve predecible y los márgenes dejan de sangrar con cupones desesperados para alcanzar las ventas mensuales.
▶︎ Trabaja las suscripciones, diseña ofertas que funcionen mes tras mes y dedica tu energía a crecer, no a apagar incendios.
2/ Stock zen
Predecir demanda ya no es magia. Un par de modelos de IA enchufados al ERP te avisan antes de que el almacén se convierta en ruleta rusa. Cuando salta la alerta, se genera la orden de compra: ni stock muerto ni roturas traumáticas que te dejan sin vender.
▶︎ Resultado: entregas puntuales, menos estrés y cero dramas post‑campaña. Pero sólo si te pones las pilas con este tema y aplicas la IA a algo que ya es necesario.
3/ Soporte ninja (+IA)
Imagina que el 70 % de los tickets se resuelven antes de que un humano toque el teclado. Con una base de conocimiento viva y un agente de IA bien entrenado, tus agentes humanos se concentran en los casos con potencial de upsell.
El cliente percibe velocidad y precisión; tú, menos costes y carritos más gordos. Win‑win.
▶︎ Yo tengo esto en marcha desde hace mucho tiempo y es maravilloso.
4/ Datos con loción anti‑parálisis
Sobrecargar el dashboard e datos es la autopista hacia la parálisis e inacción. Elige tres métricas que muevan euros —LTV/CPA, tasa de recompra, coste de adquisición (o similares)— y programa alertas en Slack cuando se desvíen.
▶︎ Ten siempre a la avista un semáforo con ellos: verde, avanza; rojo, reacciona.
5/ Tecnología con filosofía LEGO
Cada app nueva que quieres probar en tu ecommerce no debería ser un trasplante de corazón. Una arquitectura de microservicios y APIs limpias te permite añadir funciones como bloques de LEGO: sin romper lo anterior, con total tranquilidad.
▶︎ De esto te puedo hablar mucho, porque voy a fuego desde hace un par de años.
Ahora, vota para decirme el tema que más te interesa que desarrollemos:
¿Y todo esto te va a pasar a ti también?
Si sigues creciendo en ventas y complejidad, estos fuegos te llegarán: pregúntale al vecino que ya ardió. Así que, echa las barbas a remojar.
Cada euro ahorrado en operaciones es un euro libre para marketing
El pico de pedidos llegará en el peor momento; un viernes a las 23:00, o cuando tu empleado estrella esté en la playa.
Y lo más sangrante: tu cliente recuerda la última mala experiencia mejor que tu última oferta flash. Siempre.
Por tanto, es mejor que planifiques un crecimiento ordenado.
Piensa:
¿sobrevivirás al siguiente sprint de ventas?
¿o acabarás como Jesús en Ibiza 1999?
En estos 25 años de ecommerce lo he visto incontables veces:
Pon sistemas de gestión del crecimiento en marcha hoy, o pagarás intereses mañana. Así de sexy, así de simple.
▶︎ Si tienes preguntas al respecto, déjalas en comentarios, o escríbeme por privado. Seguramente te pueda ayudar.
Nos leemos la semana que viene —si no te deshidratas antes. Cuidado con el calor.
Un abrazo,
Pablo Renaud
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Spoiler: hay que pagar, pero cuesta mucho menos que el último plugin que no supiste configurar.
▶︎ IMPORTANTE: la oferta de lanzamiento acaba el 30 de junio.
Después, el precio se duplica.
Y sinceramente: es tontería perdérsela si tienes una marca que vende online o trabajas para una. Es imposible que no le saques partido a ser PRO.
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Madre mía, qué buena historia. Lo que no sé es si seré capaz de recordar el nombre de la marca dentro de un raro 😅
Brutal edición 🚀
Me encantan estas historias Sportreneur 🚀🚀🚀